Flooxer Now» Muy Fan

GIRL IN JAPAN

La historia de Anshin Doyle, la prueba de que Japón es más machista de lo que pensamos

La influencer lleva años viviendo en el país nipón, pero en los últimos meses ha sufrido como nunca las consecuencias de vivir rodeada de una cultura muy anclada en el pasado.

La influencer Anshin Doyle

La influencer Anshin DoyleAnshin Doyle / YouTube

Publicidad

Japón puede parecer un lugar fantástico si se mira desde la superficie, y está claro que tiene mucho de lo que disfrutar si lo visitas como turista. Pero si decides dar el paso de vivir allí, debes prepararte para enfrentarte a una de las culturas más restrictivas y con más discriminación por género de los países del primer mundo. El último vídeo de la youtuber Anshin Doyle es prueba de ello.

 

La influencer tuvo que empezar los trámites de su mudanza hace un par de meses, pero durante el proceso se encontró con varias barreras que le impidieron lograr algo tan simple como entrar a vivir de alquiler. Sin importar cuántos ahorros o ingresos pudiese demostrar, los dueños del lugar en el que quería entrar a vivir le indicaron que solo podían permitirle entrar en la vivienda si un hombre japonés firmaba por ella.

No es la primera vez que Anshin denuncia actitudes tan retrógradas como esta en su canal de YouTube. Ha mencionado en numerosas ocasiones la gordofobia que existe entre los japoneses, y que se extiende a ámbitos como el laboral o el de las relaciones de pareja.

 

Gracias a los youtubers que viven en Japón, hemos podido descubrir más de cerca cómo de dura puede llegar a ser la vida en un país tan idealizado como este. Estamos seguros de que a muchos de sus seguidores se les han quitado las ganas de trasladarse al territorio insular después de conocer las experiencias por las que han tenido que pasar algunos de sus creadores favoritos, como Nekojitablog.

 

Por suerte, todos estos youtubers han sabido adaptarse al entorno y han aprendido a hacer su vida en Japón sin tener que renunciar a lo que es importante para ellos. ¡Esperamos que todos ellos puedan lograr ser felices allí, mientras disfrutan del lado bueno de una cultura tan rica como la japonesa!

Publicidad