Encerrarse en un armario a oscuras durante tres días: el reto que tortura a los streamers

Twitch cuenta con una serie de normas bastante estrictas para intentar mantener la plataforma lo más inofensiva y correcta posible, pero, por lo que parece, se les ha pasado un nuevo desafío extremo que no vieron venir a la hora de escribir las normas. Esta nueva terrorífica propuesta de contenido reta a sus participantes a aguantar a oscuras en un armario durante tres días, durante los cuales los espectadores pueden ir donando para complicar todavía más la situación al participante.

Este desafío extremo empezó en el canal del streamer Erby, quien le propuso esta idea a su mod a cambio de comprarle un coche si lo conseguía. Pero, como era de esperar, este no llegó a completarlo y, pese a que ya lo han intentado otras dos personas más, ninguno ha llegado a superarlo. El último en participar ha sido el streamer IZIDORE, quien estaba muy convencido de poder conseguirlo debido a que ya ha completado retos extremos anteriormente. Pero, aun así, IZIDORE ha terminado rindiéndose a las 25 horas de intentarlo, porque sus espectadores no se lo pusieron para nada fácil.

Pese a que estar encerrado a oscuras en un armario ya supone todo un reto, su comunidad podía hacérselo pasar todavía peor mediante las distintas donaciones que había habilitado el streamer. Entre estas se encontraba la opción de tirarle un 'flashbang' por tan solo 25 bits, lo cual comporta sufrir un destello de luz blanca y un sonido queinduce tinnitus a quien lo recibe.

Y, si ya de por sí esta idea echaría para atrás a cualquiera, el desafío contaba con varias torturas más, entre las que se encontraban la de ser atacado con un soplador de hojas, golpeado con pelotas de ping pong o la más desagradable de todas: que su novia le tirara huevos. Y, como era de esperar, el streamer no fue capaz de aguantar todas estas situaciones, por lo que terminó sufriendo un ataque de pánico y abandonando. Sin duda, este desafío extremo es una propuesta descabellada como tal, por lo que habrá que cruzar los dedos y esperar que nadie más decida someterse voluntariamente a esta tortura en stream.

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