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Liopardo

Los siete filósofos que más odio

Diostuitero enumera los filósofos que más odia.

-Biblia

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Siempre he dicho que para qué estudiar filosofía teniendo a mano la teología. La teología es como el cuñado de la filosofía: todo lo sabe y de todo entiende, y sin ningún esfuerzo ni mérito intelectual. La teología es como la filosofía pero con superhéroes y eso. Y con dibujitos. Yo creo que no hay punto de comparación. A mí los filósofos siempre me han parecido irritantes. Todo el día planteándose incertidumbres, con lo bonito que es seguir el dogma y amén. Hoy os traigo los siete que más me ponen de los nervios: 7.

Friedich Nietzsche (1844-1900)

Para empezar, tiene un nombre complicado de narices. Casi nadie sabe escribirlo bien a la primera, y pronunciarlo no digamos: es lo más parecido a un estornudo. Por supuesto, me cae fatal porque dijo eso tan famoso de “Dios ha muerto”. Vamos a ver, Friedich, yo estoy aquí escribiendo este artículo y tú hace ya 116 años que estás criando malvas, ¿quién es el que está muerto ahora? Dios 1- Nietsche 0.

6. René Descartes ( 1596-1650)

Este tipo se hizo famoso por implementar el “método de la duda”. Según él, había que dudar de todo. ¡Pero vamos a ver, si empezamos así se acaba la religión, mi negocio basado en verdades absolutas! También dijo eso tan peligroso de “Pienso, luego existo”. Yo no quiero gente que piense, quiero ovejas, rebaño, y ser yo el pastor, ¡a ver si os enteráis!

5. Bertrand Russell ( 1872-1970)

A éste le tengo una manía tremenda. El muy ateo escribió un ensayo titulado “ Por qué no soy cristiano”, y se quedó tan ancho. En dicho librito decía cosas como ésta: “La religión se basa, creo yo, primeramente en el miedo. Es en parte el terror hacia lo desconocido, como ya he dicho, el anhelo de sentir que se tiene un como hermano mayor que siempre te protege y está ahí. [...] Un buen mundo necesita conocimiento, bondad y coraje; no necesita una añoranza lastimosa del pasado o el lastre al libre uso de la inteligencia de palabras dichas hace mucho tiempo por gentes ignorantes.” Tan pocas ganas tenía de venir a verme que vivió 97 años.

4. Arthur Schopenhauer (1788-1860)

Este también era un ateo de mucho cuidado. Es el autor de una de las frases más virales sobre la religión: “Las religiones, como las luciérnagas, necesitan de la oscuridad para brillar”. El tipo era un hacha a la hora de acuñar citas de esas que hacen las delicias de la Wikiquote. Otra de sus creaciones es ésta: "Exigir la inmortalidad del individuo es querer perpetuar un error hasta el infinito" Era un hombre muy optimista, como podéis ver.

3. Karl Marx (1818-1883)

¿Qué os voy a contar de este rojillo que no sepáis? Su famosa frase “La religión es el opio del pueblo” no me hizo ninguna gracia. Además es mentira, si la religión es el opio del pueblo, el opio qué es, ¿eh listillo?

2. Jean Paul Sartre ( 1905-1980)

Este ya se hizo ateo desde pequeñito. Lo cuenta en su libro “Las Palabras”, donde narra que siendo un chavalín, en una redacción sobre la Pasión en el cole obtuvo el segundo premio, lo que le cabreó sobremanera y decidió vengarse de mí: “en privado dejé de frecuentarle” afirma el muy sabelotodo.

1. Hipatia de Alejandría (370-415)

Para empezar, era mujer, lo que cualquiera que se haya leído la Biblia o haya echado un vistazo a la composición del colegio cardenalicio comprobará que no me gusta demasiado. Pero es que además era una librepensadora, filósofa, matemática y astrónoma. La buena mujer no quiso convertirse al cristianismo y fue linchada por una turba de fans míos, dicen muchos que liderados por un tipo al que luego mi Iglesia hizo santo: San Cirilo de Alejandría.

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