Flooxer Now» Noticias

Grave enfermedad

Kolderiu, youtuber y futbolista, esquiva la muerte con solo 22 años

El catalán estuvo ingresado tres semanas por una complicación inesperada de salud, y se emociona recordando los momentos más duros en una confesión para sus seguidores.

Publicidad

Seguro que a Carles Santaló sus padres no le decían mucho eso de "estás jugando demasiado a la consola" cuando era pequeño. El ahora youtuber, conocido como Kolderiu, ha sido toda su vida un apasionado del deporte, que le ha sacado completamente de los tópicos que rodean a otros creadores de contenido.

Futbolista profesional en categorías inferiores, su paso por los campos de juego le han dado un punto de vista único en FIFA, el simulador deportivo que más le gusta y por el que forma parte del equipo DUX Gaming, que tiene como propietario a DJ Mario. Una carrera espectacular que estuvo a punto acabarse dramáticamente.

A principios de este mes anunciaba que tenía que abandonar sus rutinas por unas inesperadas fiebres que le habían llevado al hospital. El tono del mensaje, muy serio, y el no saber a qué se debían sus dolores y fiebres, dejaron a sus millones de seguidores con la incógnita de qué había pasado. "No es coronavirus", aseguraba, y después un largo silencio.

Lo rompió ayer con una mezcla de alivio y mucho miedo por lo que había pasado. Una foto desde una cama hospitalaria, pero con los pulgares para arriba, servía como introducción a un vídeo contándolo todo a sus followers.

"Sentía primero unas molestias, pero fui a entrenar igual", explica. "Mis compañeros me dijeron que era una pubalgia, y yo dije que no podía ser, no podía andar y tenía mucha fiebre". El síntoma más preocupante era su incapacidad para sentir las piernas.

 

Tras descartar el COVID-19 con diferentes pruebas, descubrieron que estaba teniendo una reacción muy violenta conocida como sepsis, en la que el paciente corre grave riesgo al empeorar el estado de sus órganos. "Si una sepsis se complica, y eso puede pasar muy rápido, pues te mueres", dice justo antes de emocionarse.

"Hasta hace nada no me había planteado que me podía morir", admite con los ojos vidriosos pocos días antes de cumplir 23 años. Sus padres son médicos, y les preguntaba constantemente que "cuánto tiempo podía aguantar con esos dolores", en el límite del umbral.

"Con todo esto te planteas que tienes que disfrutar más de la vida, y quererte un poco más", añade, antes de una reflexión más optimista: "He visto la cara a la muerte y, como en el FIFA, le he dicho que por aquí no es". Probablemente, el mejor regate de su carrera.

Publicidad