Gemita, TheGrefg y un cumpleaños de ensueño en el paraíso

TheGrefg y Gemita se despiden hoy mismo de Ibiza pero pueden estar contentos porque han exprimido sus minivacaciones a base de bien. El de Murcia anunció el pasado fin de semana que desconectaba de tanto stream y ponía rumbo al paraíso. Relax y calma que la pareja necesitaba muy mucho para arrancar con buen pie en TortillaLand.

Para sus días libres el youtuber metió en la maleta a toda su familia, invitados por él y para que todos juntos disfrutaran de los frutos del duro trabajo, que las subs de Twitch no se ganan solas. Gemma, que estaba en Valencia, cogió un vuelo distinto pero con el mismo destino.

Y desde el lunes llevan dándonos envidia sana. Nosotros con el ventilador a toda potencia y ellos nadando en aguas cristalinas, disfrutando de los mejores restaurantes y sacando a relucir la vena influencer subiendo posts con el “modo ibicenca activado”.

El colofón vacacional lo tuvieron ayer y por el 26 cumpleaños de Gemma. El aniversario de la twitcher llegó en el momento justo, en el lugar indicado y David le tenía preparada una velada excepcional con sorpresa incluida.

El de Murcia, que no ha olvidado el pádel ni en Ibiza, se llevó de cena a la cumpleañera a un sitio muy especial –con mucho lujo y unas vistas tremendas–. Un menú cerquita del mar y con unos platos que olían bien desde sus historias de Instagram, ¿nos habrán guardado un tupper?

El fan del Fortnite no pasó la oportunidad de declarar a los cuatro vientos el amor que siente por su media naranja y en todas sus redes sociales: “Nunca me hubiera imaginado compartir mi vida junto a una persona como lo he hecho contigo”. Y, como no, bromista hasta en un día como el de ayer: “Que sepas que te sientan genial los 18, te quiero”.

No nos pillas, TheGrefg, que el año pasado la felicitaste por los 25 y desvelaste el secreto. A esta tierna historia le quedan muchos streams por delante, más derrotas al pádel a Ibai Llanos y otras tantísimas vacaciones. Lo que unió Twitch, que no lo separe el Mar Mediterráneo –todo lo contrario, a poder ser–.